“Lo primero felicitar a mi equipo por un fin de semana magnífico en muchos aspectos y también por el trabajo anterior. Cuando llegas aquí, parece que el trabajo anterior se olvida y hay equipos muy buenos que no han conseguido llegar aquí. El partido contra el Bilbao fue el más difícil. Teníamos claro que era importante llegar como cabeza de serie y poder jugar el jueves. Todo mi staff ha estado magnífico y sin ellos habría gente que no hubiera podido jugar. Esto me enorgullece mucho, porque habla muy bien del grupo. Estoy muy contento de como hemos sido capaces de competir los tres días”.
“El partido de hoy ha sido en la línea del de ayer. Muy sólidos defensivamente, por encima del acierto. Poco a poco hemos tenido el acierto que ha abierto el marcador. Muy contento con el trabajo de todo el equipo”.
“El “eran años locos” nos lo tomamos a risa. Estamos inmersos en una competición con un calendario muy exigente y es difícil mantener el nivel competitivo al 100% cada día. No puedes fiarte solo del resultado, tienes que trabajar para que la gente llegue en buena forma física, mental, de confianza… Tengo un gran equipo a mi alrededor que consigue esto y, por supuesto, grandes jugadores”.
“No tenía dudas de que Felipe jugaría y que lo haría bien el tiempo que fuera. Cuando te vas haciendo mayor te cuesta más coger el ritmo, pero él hace un trabajo encomiable para poder ayudar al equipo. El fisio ha trabajado más que en su vida, con muchos tocados. Felipe se merecía un torneo como éste, que la gente le valorara y no sólo por el torneo, sino por su trayectoria”.
“La confianza que tenemos en Jaycee es que si hay un último balón en el último segundo queremos que la tire Jaycee. Él nos trasmite esa confianza en el día a día, es humano y puede fallar, pero no dudamos nunca de su profesionalidad. Siempre ha sabido ser “importante” para nosotros y valoramos mucho ese aspecto de él”.
“Normalmente se lo dedico a mi familia, que aguantan mis altos y bajos. Hoy tenía al chaval en la Minicopa y ha perdido. Se lo dedico a la gente que está conmigo en los buenos y en los malos momentos. Pero si alguien se merece que le dedique este título es al grupo de trabajo que cada día estamos en Valdebebas. Los 19 títulos hablan muy bien de la competitividad del equipo. El equipo compite y eso es lo que el entrenador siempre pide. Si yo pido que ganen, sería gilipollas. Lo único que puedo exigir es competitividad y creo que en ese aspecto sólo puedo tener palabras buenas con el equipo”.
“Soy entrenador y estoy obligado cada día a tener capacidad de adaptarme a los jugadores que tienes. Por eso valoro mucho el trabajo de todo el staff. Es imposible que todos los jugadores estén contentos, pero sabemos el calendario que tenemos y la exigencia que tenemos. Siempre insisto en que tenemos que mejorar como equipo”.
(Sobre sus 6 títulos y los 5 de Aito) “Aito es un referente a todos los niveles como entrenador. Estuve en su campus cuando era un crío. Me tuvo dos horas dando pases largos. Y ahí sigue como entrenador. No gana Pablo Laso, gana el equipo, el club y la afición. Me alegro mucho, pero no por mí, sino por la gente que se alegra de nuestra victoria. Superarle no es algo que me haya propuesto, pero mira, estoy muy contento”.