Valencia, 7 Ene. 2012 (EFE).- El Gran Canaria 2014 tiene una deuda pendiente con su afición, a la que defraudó en su reciente aparición en el Centro Insular de Deportes, y pretende escalar posiciones desde la parte baja de la clasificación de la Liga a costa del Valencia Basket.
Pero aún más próxima está la derrota frente al CAI Zaragoza, que ha acabado de descolocar al conjunto que dirige el catalán Pedro Martínez.
Los baloncestistas del 'Granca' quieren reencontrarse con sus seguidores y su juego, esencialmente, con su forma de desenvolverse en la cancha, tanto en la faceta defensiva -más acertada a lo largo de la temporada- como en la atacante -su asignatura pendiente-.
El saldo de los últimos siete enfrentamientos entre estos conjuntos en la isla ha sido favorable al local en seis ocasiones. Hay que remontarse al año 2008 para contemplar una victoria del levantino (80-84).
Pedro Martínez podrá contar para este choque con todos sus efectivos.
El Valencia Basket visitará en la décima quinta jornada de la Liga ACB la pista del Gran Canaria 2014 en la que tratará de confirmar la recuperación anímica y de juego que mostró en la segunda parte del encuentro del miércoles ante el Blusens Monbus y sumar un nuevo triunfo que le acerque a la Copa del Rey.
Tras cuatro derrotas consecutivas, el equipo valenciano protagonizó una pésima primera parte ante el conjunto gallego y llegó al descanso con 15 puntos de desventaja y criticado por sus aficionados. Pero todo cambió en la reanudación y el Valencia logró un parcial de 22-0 que cambió el rumbo del choque y la imagen del equipo de Paco Olmos.
El técnico ha pedido a sus jugadores que den continuidad a ese espíritu en la cancha del Gran Canaria pero también recordó que parte de la explicación de la irregularidad que tienen es la plaga de lesiones que arrastran desde hace meses y que le impedirá contar con Stefan Markovic, Zarko Rakocevic y Andrew James Ogilvy en el choque de mañana.
Eso sí, tras la reaparición de Florent Pietrus, Vitor Faverani y Víctor Claver, el conjunto valenciano ha recuperado buena parte de su potencia física y ya sólo eso puede suponer un factor diferencial con buena parte de los equipos de la Liga ACB, entre ellos el canario.
Una derrota ante el Blusens habría minimizado las opciones valencianas para estar en la Copa pero el equipo de Paco Olmos aún tiene mucho trabajo por hacer en las tres jornadas que restan para definir los participantes en el torneo que en esta edición acogerá Barcelona.
El equipo valenciano ocupa actualmente la octava plaza, la última que da derecho a disputar la Copa, con un balance de siete triunfos y otras tantas derrotas, el mismo que el Cajasol Banca Cívica, que es séptimo, y con una victoria más que Lagun Aro GBC, Fuenlabrada y Assignia Manresa, que le persiguen en la clasificación.
El Valencia, por tanto, depende de sí mismo y el camino más sencillo sería ganar al Gran Canaria, al Fuenlabrada y al FIATC Joventut. Eso sí, con dos victoria en estos tres choques tendría muchas posibilidades de clasificarse e incluso con una tendría algunas opciones de estar en la cita.