Zaragoza/Mahón, 28 feb. 2009 (EFE).- CAI Zaragoza y ViveMenorca afrontarán mañana en la capital aragonesa un partido decisivo para su futuro en la Liga ACB, en el que la victoria, para el que la obtenga, le supondrá un alivio de cara a evitar el descenso.
Los zaragozanos llegan a este partido con una dramática racha de un triunfo en trece jornadas y cinco derrotas consecutivas, aunque no sea especialmente mejor que la de los menorquines con nueve partidos seguidos sin conocer la derrota.
Además, los rojillos no han podido olvidar la dura derrota que sufrieron en la primera vuelta en la pista menorquina (102-75) y tratarán de pagar con la misma moneda, aunque horas antes de comenzar el choque el principal objetivo es conseguir la victoria aunque solo sea por un solitario punto de ventaja.
Con quince días de por medio, por la disputa de la Copa del Rey, para relamer sus graves heridas, los zaragozanos han dado un importante salto moral con la llegada del gigante estadounidense Loren Woods, un pívot de 2,16 metros que debe suponer el punto de inflexión en sus notables carencias en el juego interior y además ayudar a mejorar a sus jugadores exteriores.
No obstante se reconoce que probablemente en este partido, con solo cinco días de entrenamiento junto a sus nuevos compañeros, no se pueda ver en su plenitud a Woods, pero todos son conscientes de lo que se espera de él.
La llegada de Woods supondrá que el jugador que, de momento, se quede sin ficha sea su compatriota Larry Lewis, un jugador que comenzó a un buen nivel pero ha terminado diluyéndose, aunque para futuros partidos también podría salir el base Taurean Green.
El técnico Alberto Angulo, que todavía no conoce la victoria en la elite después de un mes en el banquillo, tendrá a su disposición a todos los componentes de la plantilla incluido Rubén Garcés que ha arrastrado una pequeña sobrecarga.
Por su parte, el ViveMenorca se desplaza hasta Zaragoza para enfrentarse al Cai en un partido que, tras nueve derrotas consecutivas, será el más importante para el equipo menorquín.
El equipo insular dirigido por Javier Imbroda tendrá que eludir el descenso y, para eso, quiere cambiar la dinámica y dar un golpe de efecto a su peregrinar por la liga, rompiendo la racha de derrotas ante un rival que también se encuentra en una zona muy delicada y al que derrotó ampliamente en la primera vuelta en Mahón por 27 puntos de diferencia, 102-75.
Esta será la primera vez que el ViveMenorca rinda visite al CAI Zaragoza en la liga ACB, ambos equipos tienen un largo historial de enfrentamientos tanto en la liga EBA como en la LEB, en sólo uno los maños pudieron ganar a los menorquines. Los demás siempre fueron victorias isleñas.
Ambos equipos necesitan imperiosamente la victoria por lo que la ansiedad podría pasar factura, en la clasificación los maños son antepenúltimos con las mismas victorias que los mahoneses, 5, sin embargo el ViveMenorca es penúltimo con una derrota más, 17.
Una nueva derrota del ViveMenorca a falta de 10 jornadas para acabar la primera fase de la liga podría ser irreversible y le conduciría a la última posición si además el Cajasol, que es el farolillo rojo, ganara su partido al TAU Cerámica.
Para el entrenador del ViveMenorca, Javier Imbroda, \"en el partido participarán factores externos y no sólo deportivos, ellos son conscientes de lo que se juegan, que es más que nosotros, y están preparado toda una parafernalia en torno al encuentro, sabemos que no sólo será un partido y por eso han puesto en marcha iniciativas típicas para animar como trompetas y camisetas\".
\"Sabemos que el partido es clave para nuestros intereses y estamos preparados par aguantar un ambiente complicado\", añade.
El entrenador del ViveMenorca cree que su equipo llega a Zaragoza \"centrado en estar sólidos y en ganar ante un rival que es una incógnita por el largo descanso, la llegada de un jugador nuevo y la necesidad de ganar\".