El Asefa Estu quiere llevarse el derbi más dramático

Madrid, 21 Abr. 2012 (EFE).- El Real Madrid no quiere más tropiezos y menos en casa y en un nuevo derbi ante el Asefa Estudiantes, por asegurar la segunda plaza y por intentar el asalto al liderato y al Barcelona hasta el último aliento.

Los derbis madrileños casi siempre son distintos y especiales, aunque, también casi siempre, acabe ganado el Real Madrid como lo demuestran los números, 66-13 en victorias/derrotas con los blancos como locales, las seis últimas de forma consecutiva.

Pablo Laso podrá volver a contar con el serbio Nole Velickovic que ya se entrena con normalidad con el equipo desde el pasado jueves, después de haber superado las molestias de la rodilla que le llevan martirizando durante toda la temporada.

Quien no estará todavía será Jaycee Carroll. El escolta estadounidense ha superado las secuelas de una pancreatitis aguda, pero todavía no ha recuperado todo el peso, ni está condiciones de poder jugar partidos.

Carroll ya ha acudido con sus compañeros a entrenarse, pero no ha entrado en la dinámica del equipo y se ha limitado a diversos ejercicios físicos y a suaves sesiones de tiro. En el derbi podría hasta enfundarse la equipación deportiva y sentarse en el banquillo, pero no disputará un solo minuto en cualquier caso.

Los jugadores de Laso todavía recuerdan la derrota de la primera vuelta por 90-86 y especialmente los que tienen pasado estudiantil quieren que eso no vuelva a repetirse. Siempre es un partido especial para Felipe Reyes, Carlos Suárez, Sergio Rodríguez y para Dani Díez.

"Saldremos a jugar el partido al cien por cien desde el principio; jugamos en casa y eso es importante para nosotros sobre todo porque es un derbi. Eso siempre motiva mucho. Será complicado e intenso. Intentaremos hacer cuarenta minutos regulares para conseguir la victoria", comentó Sergio Llull

"El Asefa Estudiantes es un rival muy peligroso. Se juega la vida, la permanencia. Y, además, entre Estudiantes y Real Madrid siempre ha existido mucha rivalidad. Ellos vendrán muy motivados. Aunque se vea mucha diferencia en la tabla será un partido igualado al que nosotros no llegaremos relajados. Ya nos vencieron en la primera vuelta y llegamos con ganas de resarcirnos", sentenció el capitán Felipe Reyes.

El Asefa Estudiantes visita al Real Madrid en un nuevo derbi, el número 157 en la historia de la Liga, en el que buscará la que sería su tercera victoria consecutiva, una vital bocanada de oxígeno casi imprescindible para sobrevivir.

Las dos últimas victorias ante el Gran Canaria y ante el Lucentum Alicante, el pasado jueves, han modificado la calificación del club colegial en la Liga, pasando de moribundo a enfermo muy grave.

Trifon Poch, entrenador de Estudiantes, lo explicó con otras palabras tras vencer al Lucentum.

"Para salir de la situación en la que estamos hay un componente mental muy grande, y hay que romper barreras para volvernos a sentir un equipo. Nos hemos sentido un equipo normal y hemos jugado sin dudas y miedo", dijo Poch.

"Con estas dos últimas victorias seguimos ahí. Y este es el camino por el que debemos continuar. Un camino muy duro con enfrentamientos directos contra equipos con los que jugamos el bacalao", añadió el entrenador.

Estudiantes ya ganó en el partido de la primera vuelta al Real Madrid, 90-86, y conseguir ahora la victoria significaría dar un paso de gigante en la lucha por la salvación.

Los jugadores son todos conscientes de ello y reconfortados con sus últimas actuaciones, ven el derbi con otros ojos.

"Los derbis siempre son un partido especial, no importa la clasificación, siempre son especiales y emocionantes para jugadores y afición", comentó Daniel Clark.

"Ya hemos ganado al Real Madrid una vez, y en los derbis puede pasar cualquier cosa", dijo el base Jaime Fernández, mientras que el pívot Germán Gabriel, pieza clave en los colegiales, prefirió un perfil más bajo. "Tenemos que prepararlo, disfrutarlo, y ver que podemos sacar", observó.