No ha sido su primer paseo hasta la sala de prensa del pabellón Príncipe Felipe, ni las caras de los medios que le aguardaban le eran desconocidas para él cuando Stan Okoye ha entrado para su presentación. En el regreso de la afición a los pabellones, no ha olvidado a la ‘marea roja’ a la que desea ver en la mayor cantidad posible.
Los primeros días en la capital aragonesa están transcurriendo de forma cómodo, “intentando coger la familiaridad que tenía hace tres años, yendo a los mismos restaurantes donde iba antes, viendo las mismas caras de entonces. Está muy bien eso de regresar y me hace feliz”, expresaba.
Tras el paréntesis fuera de Zaragoza, la ‘marea roja’ conserva el regusto de la imagen triunfal que dejó a orillas del Ebro. “Cada vez que juego doy lo mejor de mí, depende del plan de partido, de si juegan para mí o para otros, pero siempre voy a hacer lo que le pida el equipo y hacerlo lo mejor posible”, señalaba.
Compañero de vestuario del español Santi Yusta, todavía no ha podido avanzar en cómo compenetrarse y avanzar juntos por el mismo camino. “Es pronto para decir. Lo conozco de haber sido rivales y de momento lo único que hacemos es coger sensaciones en los entrenamientos”, señaló.
Con apenas dos sesiones de trabajo sin la totalidad de sus nuevos compañeros aún, Okoye no habló de objetivos concretos sino más bien de “enfocar cada partido e intentar conseguir química, que cada jugador aporte lo mejor de sí mismo y contribuya al éxito del equipo intentando jugar mejor cada día”, dijo.
Un periodo estival en el que estuvo con su selección aunque no llegó a entrar en la lista definitiva para los JJOO de Tokyo, por lo que su estado de forma se adapta al escaso tiempo que ha estado menos activo. “Ahora mismo me encuentro bien pero no en el mejor momento, claro está, pero con los entrenamientos y las sensaciones cada día iré a más”, comentaba.
Al regreso del exterior nigeriano se suma el retorno de la ‘marea roja’ a la grada, algo que no pasa desapercibido a Okoye, a la hora de afrontar los encuentros en el Príncipe Felipe. “Está claro que Zaragoza es uno de los mejores sitios de Europa para jugar como local por la gran atmósfera que se genera. Ojalá podamos tener el mayor número de abonados posible en la grada porque los necesitamos”, concluyó el jugador.