El Real Madrid se colocó este sábado como líder en solitario de la Liga Endesa tras vencer por 76-83 en casa del Monbus Obradoiro y aprovechar la derrota del San Pablo Burgos frente al Morabanc Andorra (87-74).
Los hombres de Pablo Laso curan de este modo las heridas de la derrota del pasado jueves en Kaunas en la Euroliga y permanecen como único equipo invicto de la competición liguera, mientras que el Monbus Obradoiro, este sábado vestido de llamativo rosa para solidarizarse con el Día Mundial contra el Cáncer de Mama, sigue sin alzar el vuelo de la zona baja de la tabla al sumar tan solo una victoria en los primeros cinco partidos.
El equipo gallego comenzó cohibido ante un Real Madrid que exhibía sin pudor la superioridad física de Walter Tavares en la pintura, aunque el pívot caboverdiano se tuvo que ir pronto al banquillo tras cometer dos faltas consecutivas sobre Dejan Kravic, que con sus canastas igualó el partido y cerró la pequeña brecha abierta por los visitantes: de 3-9 a 10-9.
El interior serbio, con diez tantos, fue la figura más destacada de un primer cuarto que el conjunto gallego consiguió cerrar por delante en el marcador gracias a un gran acierto en el lanzamiento y a una intensidad defensiva que desató bastantes protestas entre los jugadores madridistas (23-19).
La tensión creció todavía más durante un segundo cuarto en el que señalaron faltas técnicas sobre Maxime de Zeeuw y Jaycee Carroll por un enfrentamiento entre ambos y sobre Pablo Laso por sus protestas al trío arbitral.
De este juego trabado salió beneficiado un Real Madrid desdibujado en defensa hasta entonces, que desde el tiro libre recuperó el pulso y el liderazgo del partido (27-29) al aprovechar la temprana entrada en bonus de los locales, muy castigados por las faltas cometidas en este cuarto.
Un Nicolás Laprovittola inédito hasta este período tensó la cuerda al anotar catorce puntos en apenas siete minutos de juego (34-42), aunque el Monbus Obradoiro respondió con una mejor defensa y consiguió llegar al descanso todavía con opciones (37-44).
Tras la reanudación cambiaron los protagonistas, pero no la tónica de un encuentro que permaneció ligeramente favorable al Madrid pese a los intentos de Mike Daum -8 puntos en el tercer cuarto- por remediarlo, que fueron contrarrestados por la conexión argentina entre Facundo Campazzo y Gabriel Deck.
La profunda rotación y la calidad individual de los visitantes les permitieron despegarse por momentos hasta los trece puntos de diferencia, pero los bailes en la pintura de Kravic y Vladimir Brodziansky dieron vida al Monbus Obradoiro y recortaron la ventaja al cierre del tercer parcial (57-65).
A falta del lesionado Kostas Vasileiadis, los locales encontraron en Mike Daum un inesperado líder durante en el último cuarto, en el que con sus enérgicas acciones volteó un encuentro que el equipo compostelano llegó a dominar tras un triple de Brodziansky (73-71) a falta de cinco minutos para el final.
Sin embargo, un desaparecido hasta el momento Sergio Llull tomó las riendas del vigente campeón y pisó el acelerador a para devolver la tranquilidad a su equipo con dos grandes acciones y poco más de dos minutos por jugarse (73-78).
Un triple de Rudy Fernández y una bandeja esforzada de Campazzo finiquitaron un parcial favorable a los madridistas de 0-12 y terminaron con las aspiraciones del conjunto gallego, que cayó finalmente derrotado por 76-83.
76 - Monbus Obradoiro (23+14+20+19): Kravic (19), Calloway (8), de Zeeuw (4), Muñoz (6), Czerapowicz (5), -quinteto inicial- Magee (9), Brodziansky (10), Navarro (0) Daum (15), Pozas (0).
96 - Real Madrid (19+25+21+18): Campazzo (14), Garuba (3), Carroll (7), Tavares (6), Taylor (2), -quinteto inicial- Causeur (8), Randolph (5), Fernández (3), Laprovittola (14), Deck (8), Llull (9), Mickey (4).
Árbitros: Conde, Aliaga, Alcaraz. Incidencias: Partido correspondiente a la quinta jornada de la Liga Endesa disputado en el Multiusos Fontes do Sar ante 5.824 espectadores.